PALMAS Y COSCORRONES PARA MISTURA 2013
Fueron muchos puntos a favor, acompañados también de algunos aspectos en contra, los que han tambaleado en esta reciente edición de la feria gastronómica que se vislumbra como la más importante del continente.
Propuestas culinarias diversas; delicias combinadas con muchos ingredientes de cada región de nuestro Perú, y potajes por demás sabrosos, se encargaron de deleitar el paladar de cada visitante que se dio cita este año en Mistura, realizada en esta ocasión en la Costa Verde del distrito de Magdalena del Mar.
Sin embargo, hubieron algunos (por no decir varios) detalles que no pasaron inadvertidos para el público, y menos para quienes han criticado desde siempre, el evento como mercantilista y exclusivo.
Uno de los puntos flacos de esta edición, fue sin duda el alza del precio de entrada. Si bien desde fines del mes de julio se estuvo impulsando la pre-venta a S/ 20 en las sedes de Teleticket de Wong y Metro, el costo real, que era de S/ 25 no convencía a una gran parte de la población, a pesar de que este encuentro culinario contó con dos días populares, que fueron los lunes y miércoles, y donde las entradas se reducían a S/ 15. No obstante, la afluencia del público no se vio finalmente tan reducida este año.
Pero otra característica de esta edición, y que si causó gran malestar y fastidio, según manifestaron varios asiduos comensales, fue sin duda el hecho de formar parte de extensas colas; uno, solo para poder ingresar a la feria, dos, al momento de querer cancelar el plato requerido, y finalmente, esperar incluso, por casi más de una hora para recibir tu pedido. De hecho, el espacio que se caracterizó por este suerte de molestia, fue el Mundo de las Brasas, donde el añorado Chancho al palo fue el más solicitado por la mayoría.
El tener que comer de pie, debido al acaparamiento inmediato de los comensales en las mesas con las que contaba la feria; además terminar con los zapatos empolvados a causa del escaso asfaltado del recinto, terminó para “remate”, con la necesidad de hacer largas colas para tomar el bus del Metropolitano que los llevara de regreso hasta la parte superior de la Estación Central, en el Cercado de Lima.
Por su parte, Bernardo Roca Rey, presidente de Apega (Asociación Peruana de Gastronomía), señaló que todo el dinero recaudado va dirigido a cubrir el costo de la infraestructura del reciento, es decir, el armado y desarmado del mismo. “Pueden estar seguros de que nosotros con la plata no nos quedamos. Yo no gano con esto”, declaró para un conocido medio local, y además, informó que también con ese dinero que se cobra por el ingreso en los días que dura la feria, se paga a los participantes que vienen del interior del país a ofrecer sus productos.
Asimismo, Roca Rey, en esas últimas declaraciones dejó entrever que un apoyo del Gobierno Central no les vendría mal. Y es claro que al público masivo que asiste a la feria le sería absolutamente beneficioso y hasta placentero; por ejemplo, con la edificación de un recinto oficial, ya propio para llevar a cabo esta cita culinaria que se avizora como el de mayor proporción de América y del mundo, se vería la posibilidad que se reduzca a la mitad el precio de la entrada.
En resumen, algunos se han excusado ante las molestias ocasionadas; otros han exhortado a la población (y a la crítica especializada) un poco de comprensión y tolerancia. Pero al fin y al cabo, tanto lo dulce como lo amargo de lo que significa en si la experiencia en Mistura, se puso en manifiesto y fueron muchas las opiniones, los alcances, y sobre todo, las recomendaciones que el público que asistió a este encuentro con lo mejor de nuestra cocina, hizo al término de un finalmente, exitoso evento.
Solo queda decir, no sin antes hacerle un llamado a Francis Allison, actual burgomaestre del distrito de Magdalena del Mar: que si el evento va continuar sus siguientes cuatro ediciones dentro de su jurisdicción, y en plena Costa Verde, que por favor, un poco de asfaltado al terreno destinado a cortejarnos con lo mejor de nuestra gastronomía sería genial; y que las obras, no las vaya a rotular como “ya culminadas”, porque miles de limeños que visitamos la feria, lastimosamente no pudimos presenciar ello…o al menos no totalmente. Sin otro pendiente, solo hay que decir, hasta la próxima edición 2014!!!
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Joven de 26 años, recién egresado de periodismo. Amante fiel del cine, el teatro, de la música, la literatura, el arte. En fin.
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No somos cientos, aunque tampoco millones; pero fácil somos miles quienes tenemos ganas de decir algo, de cambiar algo, de expresarnos...